Terapia individual para adultos

Porque siempre hay tiempo para crecer

Un viaje sanador a lo más profundo de tu mente

En la terapia individual para adultos, trazamos un viaje único y personalizado, guiando a cada paciente a descubrir las capas más profundas de su experiencia emocional y mental. Nuestra misión es proporcionar un espacio seguro y de apoyo, donde cada individuo pueda explorar aquello que le perturba, identificar las fuentes de su sufrimiento y aprender estrategias efectivas para enfrentarlas.

A lo largo de este proceso, trabajamos mano a mano con el paciente, fomentando la conciencia del «aquí y ahora» para entender cómo las experiencias pasadas pueden influir en el presente. A través de la terapia Gestalt, nos enfocamos en la integración de pensamientos, emociones y comportamientos, alentando una comprensión holística de la persona.

A la búsqueda de la autenticidad

Nuestro objetivo es más que simplemente aliviar el sufrimiento; aspiramos a facilitar un camino hacia la autenticidad. Ayudamos a los pacientes a identificar y superar patrones de pensamiento y comportamiento que pueden estar limitando su crecimiento personal. Trabajamos juntos para construir una vida más auténtica, alineada con los valores y deseos más profundos de cada individuo.

La terapia individual para adultos es un proceso transformador que no solo aborda los síntomas superficiales, sino que se sumerge en las raíces de la experiencia personal. Cada sesión es una oportunidad para descubrir, aprender y avanzar hacia una vida más plena y significativa. Estamos comprometidos a ser guías comprensivos y empáticos en este viaje hacia la autenticidad y el bienestar integral.

Preceptos de la terapia Gestalt

  • Vive ahora, preocupate del presente más que del pasado o el futuro.
  • Vive aquí, relacionate más con lo presente que con lo ausente.
  • Dejar de imaginar, experimenta lo real.
  • Abandona los pensamientos innecesarios; más bien siente y observa.
  • Prefiere expresar antes que manipular, explicar, justificar o juzgar.
  • Entragate al desagrado y al dolor tal como al placer.
  • No aceptes ningún otro debería o tendrás más que el tuyo propio.
  • Responsabilízate de tus acciones, sentimientos y pensamientos.
  • Acepta como eres.